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sábado, 9 de noviembre de 2013

Oro del Perú

Oro del Perú Del Cuarto del rescate al mito de El Dorado


El mito de El Dorado, aquella ciudad perdida en algún lugar de Sudamérica, hecha totalmente de oro, surgió en el imaginario occidental gracias a los relatos del rescate de Atahualpa y Coricancha.
Palabras clave: mito, El Dorado, Perú, oro, minería

El estado actual del Cuarto del Rescate fue otro de los temas tratados en la Audiencia Regional... se encuentra rodeado por viviendas, por lo que la Beneficencia Pública [de Cajamarca] realiza gestiones a fin de liberar de ese entorno a este monumento histórico

Uno de los estudios... sobre el potencial minero de la región Cajamarca señala que el valor de las reservas mineras está en el orden de los 142 mil millones de dólares.


I. El Mito.
¿Podría haber aparecido en el imaginario español (y occidental) el poderoso mito de El Dorado sin la existencia real (material, tangible y mensurable) del fabuloso tesoro del Cuarto del Rescate y del Oro de los Incas? La respuesta es simple: NO. Y es NO por lo siguiente.
Ese mito, surgido entre los españoles y que sería una de las grandes ideas -  fuerza que impulsarían su expansión cada vez más al interior de América del Sur, dice lo siguiente. Caminando desde la costa del Pacífico y  cruzando los Andes, en algún lugar al Oriente (o sea en alguna parte de la inmensa región sudamericana que desde 1542 sería conocida como  Amazónica) se encontraría una ciudad secreta, construida toda de oro (paredes, templos, etc),  capital residencial de un poderoso Rey Indígena y su corte. Ese Rey era de una sociedad que tenía por dios al Sol y por eso la ciudad era construida de oro para rendirle pleitesía siempre ya que ese metal era considerado encarnación terrena de esa divinidad. Otra versión de ese mito dice que un Príncipe Indígena diariamente se cubría con polvo de oro y, en un lago, se bañaba retirando el oro de su cuerpo el que, por su peso, se depositaba en el fondo. Ese Príncipe, también adorador del Sol, anualmente viajaba hasta el centro del lago en una balsa cargada de objetos auríferos los que, ritualmente, eran tirados al agua: así por siglos.

II. La realidad detrás del mito.
La Historia muestra que en 1532 territorios que hoy conforman el Perú tuvieron la desgracia de comenzar a ser invadidos por conquistadores españoles los que eran comandados por el analfabeto y ex - criador de cerdos Francisco Pizarro. De todas las consecuencias de esa historia muy infeliz lo que interesa recuperar aquí es lo siguiente.
En noviembre de 1532 Atahualpa, históricamente el último de los soberanos Incas, descansaba en su residencia de invierno de Cajamarca tomando baños en las aguas termales de esa ciudad. Entonces fue que aceptó la propuesta de embajadores de Pizarro para un encuentro que, por consenso entre las partes,  fue denominado de pacífico razón por la cual aceptó presentarse con su ejército desarmado. El encuentro fue el 16 de noviembre. Allí Atahualpa y todos los otros  Incas de su séquito fueron sorprendidos porque los españoles quienes, guiándose por sus principios de usar cualquier medio para obtener victorias, habían mentido pues repentina y traicioneramente atacaron y capturaron al Monarca Inca. Posteriormente lo asesinarían, aplicándole la pena del garrote. Este capítulo de la historia pasó a ser conocido como El Rescate

viernes, 8 de noviembre de 2013

El Muki, Muki, Muqui dueño del oro y las minas

Muqui (mitología)

El muqui, muki o anchancho,


 es un duende de la mitología de los Andes centrales en Bolivia, Perú, Ecuador, y Colombia; el cual se caracteriza por ser minero y, como tal, su existencia está circunscrita al espacio subterráneo: el muqui habita en el interior de la mina.
La palabra Muqui resulta de la castellanización del vocablo quechua murik, que significa "el que asfixia" o muriska "el que es asfixiado". En su vertiente huancavelicana, la palabra muqui sugiere "el acto de torcer", "ahorcar". Por ello, los antiguos mineros inconscientemente, identificaron al Muqui con el sílice, polvo letal que produce la enfermedad de la silicosis. Aunque también Muki en quechua significa "húmedo" o "humedad". De ahí se dice que el Muki aparece en los lugares donde hay agua.
A pesar de la distancia y el aislamiento de los campamentos mineros, la creencia y la descripción del Muki es, prácticamente, la misma en la sierra desde Puno, en el sur hasta Cajamarca en el norte del Perú, en el centro hasta Pasco, aunque su nombre varía en algunos lugares. En Arequipa, por ejemplo, se le llama “Chinchilico”; en Puno, “Anchancho” en Pasco y la región andina de Bolivia, “Muqui” y en Cajamarca, “Jusshi”. Todas estas ciudades están localizadas en el Perú.
La fusión (sincretismo) de la cultura indígena con la cristiana, supuso también la inclusión de creencias occidentales con respecto a este mito, tal como que las principales vícitimas de estos duendecillos era los niños moritos, aquellos que aún no habían recibido el bautismo; incluso se menciona en algunos lugares del sur del país, que son estos niños no bautizados, eran quienes se convertían en los duendecillos. Según antiguos relatos, Los niños que no son bautizados, son raptados por los duendes, los cuales viven (o se esconden) en las higueras o platanales, para que se conviertan en uno de ellos. El niño que se encuentra con estos seres, aparte de recibir un gran susto adquiere una piel muy pálida, por lo que se recomienda llevar lo más antes posible a una iglesia para que reciba el Sacramento.
La creencia en el Muki surgiría tanto de las antiguas tradiciones andinas sobre los demonios y pequeños seres que pueblan el “Uku Pacha” o mundo de abajo, como de los propios temores y de la necesidad de los trabajadores de encontrar una explicación a las cosas extraordinarias que suelen ocurrir diariamente en la labor minera.
Como se advierte, en el imaginario popular, no existe un solo tipo de Muqui. Así como hay diversidad de elfos mineros a nivel universal, existen también variedades de Muquis en el mundo subterráneo de los Andes. Se les conoce por los lugares en que se hicieron visibles. Sus diferencias son formales antes que de esencia. Así tenemos Muquis de Huacracocha, de Goyllar, de Morococha, de El Diamante, de Santender, de la Mina Tentadora, de la mina Julcani, de Excélsior, por citar algunos de los más conocidos de una inacabable relación que corresponde a la tradición oral de las minas.

Fisonomía, vestimenta y costumbres

De estatura pequeña, el Muqui no excede los cincuenta centímetros, perteneciendo, estos seres, a la categoría de los enanos.
Para la tradición cerreña, el Muqui es un ser pequeño, de cuerpo fornido y desproporcionado. Su cabeza está unida al tronco, pues no tiene cuello. Su voz es grave y ronca, no concordante con su estatura. Sus cabellos son largos, de color rubio brillante. Su rostro es colorado y está cubierto de vellos. Posee una barba larga, del color blanquecino de la alcaparrosa. Su mirada es penetrante, agresiva e hipnótica, de reflejos metálicos. En otras tradiciones mineras, su cabeza presenta dos cuernos. Éstos le sirven para romper las rocas y señalar las vetas. Su piel es muy blanca y lleva colgado de la mano un farolito (cf. Sosa y Tamara). Además tiene las orejas en punta. (La influencia occidental es nítida en este aspecto de la representación. El diablo, originario de la cultura etrusca y difundido extensamente en el bajo medioevo por el catolicismo, ha sido vinculado con los duendes mineros. Los metalarios del periodo inicial de la alquimia, atribuían a los duendes, gnomos, kobolds y al diablo mismo, las perturbaciones en el tratamiento de los metales. Por ejemplo, el nombre del cobalto deriva de kobold (duende escandinavo) y níquel del diablo mismo, como lo llamaba un sector de alquimistas.)
Habitan en lugares desérticos, atacan produciendo bastante miedo a sus víctimas o adversarios, se dice que suelen llevarse niños solos e indefensos; un secreto de personas antiguas para enfrentarlos es quitarse el cinturón o correa de los pantalones y darles con el cinturón con mucha fuerza sin dejarse vencer por el miedo.
Su descripción varía de acuerdo a la época. Antiguamente, por la década de los años 1930, se decía que recorría los socavones sosteniendo en la mano, una pequeña lámpara de carburo, abrigado con un poncho hecho de lana de vicuña. Tenía en la cabeza dos pequeños cuernos relucientes y hablaba con voz suave. En la actualidad no es muy diferente, aunque ahora vista ropa de minero, botas de agua y use una linterna eléctrica a batería. A veces el pequeño duende toma también la forma de animal o de un hombre muy blanco y rubio para presentarse a los mineros y engañarlos.
La leyenda del Muqui, se encuentra ampliamente extendida en el ambiente minero de los Andes Centrales.
Consecuente con las exigencias del trabajo, el Muqui usa casco, ropa de minero y calza botas claveteadas. En otras tradiciones, se le representa como un geniecillo vestido de verde musgo, a veces con una finísima capa de vicuña o con el traje impermeable que usan los mineros. Generalmente, porta en la cintura una lámpara, ya de carburo, ya eléctrica, según el avance teconológico de la mina. Lleva un shicullo, soga de pelos de la cola del caballo, atado a la cintura. Camina como pato, pues sus pies son de tamaño anormal. Sus extremidades inferiores pueden adoptar la forma de las patas de un ganso o cuervo. Asimismo, pueden tener la punta hacia atrás. Por ello su ropa les cubre hasta los pies. Los curiosos esparcen ceniza o harina en su camino para auscultar la huella que dejan a su paso.
El Muqui puede andar solo o acompañado: refieren, algunos informantes, episodios protagonizados por varios Muquis formando grupos; otros dan fe sobre su inclinación de vivir solos. Pueblan, estos seres, un mundo de eterna oscuridad, sin tiempo. No se le ha visto envejecer, pareciera que el tiempo no le afecta. Y, en su sorprendente existir, se torna visible o invisible a los ojos mortales. Los Muquis gustan de lanzar penetrantes silbidos. Éstos, anuncian peligro y salvaguardan a los mineros de su simpatía. En otras ocasiones, producen desconcierto y miedo. Los Muquis, son comunicativos. Hablan a los oídos, conversan en los sueños, poseen un extraño poder premonitorio. Esta energía dialogal es sentida, vitalmente, por las gentes de las minas. El Muqui no gusta de los agnósticos. Le molesta que duden de su existencia.
El Muqui se inmiscuye en el destino de los trabajadores del socavón, gratificándolos o escarmentándolos. Es un misterioso enano conocido como el dueño de las minas.
El Muqui es un duende investido de poder. A su voluntad, hace aparecer o desaparecer las vetas (veta de oro). Está atento a las obsesiones, resentimientos, ambiciones y frustraciones de los mineros. Y, al tiempo que demuestra simpatía hacia unos, genera castigo y escarmiento a otros. Puede aliviar el trabajo, ablandar las vetas o endurecerlas, si prefiere. Suele conceder favores, establecer pactos, sellar alianzas, llegar a acuerdos a plazo fijo, que cobra puntual e inexorablemente. Pues, estos donantes de la buena o mala suerte, poseen un código de honor preciso y reservado. Su ética exige discreción y reciprocidad en sus pactos. De allí que los amigos del Muqui sean personas de opiniones reservadas y criterios parcos.
La mayoría de relatos coinciden en que es posible atrapar al Muqui y hacer “pacto” con él para enriquecerse. En el caso más frecuente el enanito de las minas ofrece al trabajador hacer su “tarea” a cambio de coca, alcohol y hasta de la compañía de una mujer para mitigar su soledad. Pero casi siempre el resultado del pacto es trágico, pues a la larga de una u otra manera el minero incumple y el Muqui se venga quintándole la vida.
El Muqui se abstrae en el juego o el trabajo. Por esa razón bien puede observársele sin que lo advierta. En esa circunstancia, los audaces, logran cogerlo y sujetarlo con el shicullo. En tal caso, al Muqui "se le amarra sólo con soga de cerda de caballo, porque hasta el alambre lo rompe" (cf. Huanay: 78-79). Enseguida, se lo cubre con la misma ropa de su captor. Este secreto, lo inmoviliza. Ha habido mineros que habiéndolo amarrado lo han amenazado con llevarlo a la luz y el Muqui se ha vencido, sabedor de su debilidad: los reflejos del sol lo desvanecen y matan.

lunes, 4 de noviembre de 2013

LA HISTORIA REAL COMO FUERON OCULTADOS ESTES TESOROS

Esta historia no está escrita  en ningún libro, esta versión que estoy escribiendo por primera vez corresponde a la deducción de  mis estudios de investigación basada en la recopilación de muchos relatos orales. Estoy muy seguro que provocará polémicas y muchos cuestionamientos, pero las futuras investigaciones y hallazgos me darán la razón, provocando nuevas corrientes de pensamientos aunque en los más escépticos.

En 1822, un año  después de la independencia del Perú,  el general  José de San Martín  solicitó  un préstamo de 1.200.000 libras esterlinas. Cada libra  era de oro puro y pesaba  8 gramos. Que pasaría a administrar la junta de accionista bajo la presidencia de José de san Martin. Durante todos esos años círculo la libra esterlina. En 1879 y 1883 se da la Guerra del Pacifico   Perú – Chile. Chile,  a medida que avanzaba, realizaba saqueos en todo el territorio peruano. Faltando unos 3 días para que el ejército chileno llegue Lima y al ver que las libras esterlinas del gobierno peligraban, los gobernantes del Perú tomaron  sus precauciones. Acá empieza la historia…
En aquel tiempo, el presidente de la junta que administraba el tesoro y dinero del país, era un español. Al ver que los chilenos ya estaban cerca, los objetos de oro, las libras  esterlinas y otros tesoros del país  fueron encomendados a esta persona, asignándole  un séquito compuesto por  300 soldados y 600 mulas para transportar y  ocultar todo  hasta que pase la guerra. Cumpliendo las ordenes emanadas de la superioridad  los tesoros  fueron enterrados en lugares lejanos. El español  iba anotando y  describiendo en clave  los lugares donde quedaban escondidos los tesoros y dejaba  señales en las piedras y en las  faldas de los cerros, a fin de garantizar su seguridad. Durante el camino iba dejando y  enterrando los tesoros separando dos hombres y cuatro mulas en diferentes lugares. Describía el nombre de los pueblos, de los ríos y lagunas. Daba cicuta  a los soldados y los enterraba junto a los tesoros para evitar poner en riesgo los tesoros del estado. Las descripciones parecen corresponder a  la ruta que en la actualidad abarca  los departamentos de Junín, Pasco, Huancayo y Huánuco.
Cada mula transportaba cincuenta kilos en una alforja, veinticinco kilos por lado entre oro, plata,  libras esterlinas, diamantes y piedras preciosas. Que, como ya  lo dijimos más arriba, fueron enterrados en los encañadas de los ríos, debajo de enormes piedras, en muchos lugares inimaginables, pero eso sí, siempre señaladas con claves. Los he visto pero no  logro aun descifrarlos.
El español, al finalizar su misión retorno  a Lima después de casi dos meses. Al darse cuenta que era el único poseedor del cuaderno, decidió marcharse, zarpó en el año 1883 del puerto del Callao rumbo a España sin dejar  rastros. Mientras el país estaba ocupado en la guerra nadie lo buscó, pues el que había dado la orden murió en la guerra con Chile. Recuerden que esto es real.
¿Demonios y como sabes esta historia? Se estará preguntando el lector. En 1963 aparece otro español, era el bisnieto del  español fugitivo responsable de los entierros de los tesoros. El bisnieto contrata un guía y se dirige a la sierra central  en ferrocarril. Contrata veintidós hombres  y al llegar  a Huancayo basándose en las descripciones  del cuaderno del bisabuelo logra desenterrar el primer entierro . La descripción decía  así: “Debajo de la mama pancha con donde nace su  hijo menor se van a tomar agua de mucha sed y un numero  2”.
La clave indicaba un cerro que asemejaba  una figura de mujer y una figura de un bebe, en cuya cabecera nacía el riachuelo.  En aquel lugar hallaron dos cargamentos  de esterlinas y objetos en oro. El bisnieto  llego a desenterrar en otros tres lugares más,  pago a sus hombres y retornó  a España con el cuaderno. Recién   empiezan a circular los primeros  rumores. Diez años después, en 1973 regresa nuevamente con el cuaderno y contrata un nuevo guía  que lo lleve a Huánuco, a la provincia de Ambo, allí contrata un grupo de obreros y  se dirigen a Maray Pata  hasta el lugar llamado  Yurac Caballo.
En Maray Pata tratan de ubicar la descripción y descifrar la señal, al no  lograrlo, pernoctan en  el lugar, al amanecer del día siguiente ubican un lugar, pero al amanecer del tercer día  el español al despertar se da con la ingrata sorpresa de no poseer más el cuaderno, vociferando y rogando buscó el libro por quince días, llego a ofrecer la mitad del tesoro a quien lo encontrara. Pero al ver que sus esfuerzos eran vanos, no tuvo más remedio que retornar a su país.
Desde ese entonces la  gente va y viene en búsqueda de tesoros. Repito he estado allí y  he visto las claves. También he participado en los rituales de sacar oro tapado. Una cosa les digo: “Nunca se metan con cosas que no  conocen. La metafísica da explicaciones  para los que quieran profundizar”.   
Saben ¿Por qué no habrán en ningún lado, las muestras de estas libras  esterlinas?, 

Pues han sido ocultadas y enterradas. 

TESOROS OCULTOS EN EL PERU, ¿COMO ME ENTERE?

 la historia de como me entere de los 

Tesoros Ocultos. 100% real


Por primera vez publicados después de más de 150 años  que permanecieron ocultas ante a todo el País y que todo peruano debe de conocer, una historia siniestra y real todo por conservar  y guardar la riqueza del Perú.   
Elger Flores Marchena o Elger Marchena o simplemente Marchena, por causas y razones del destino, la vida me separo de mis padres a temprana edad, llevándome a una vida de esfuerzo y sacrificio, por lo cual estoy muy satisfecho, ya que he crecido a mi libertad y he seguido mi instinto permitiéndome conocer y recorrer lugares muy peligrosos a mi corta edad,  aquí empieza esta historia que parece sacada de ficción pero es Real.
Una noche de 1995, era en mes de enero entre la fecha 10 a 13 de enero, habían terminado las clases de fin de año y tenía que trabajar esas vacaciones, para comprar mis útiles escolares para continuar con mis estudios secundarios. Que gracias a Dios los termine.
Esa noche me encontraba en la plazuela de Bellavista (Región San Martin), estaba solo sentado y tenía la costumbre de salir a la plaza después de terminar el día de trabajo. Cuando me acercaron doy personas ancianas entre los 60 a 63 años tenían ambos,  en ese tiempo mi edad era de  15 años, me saludaron muy amablemente. Me preguntaron ¿Cuánto me pagaban el jornal? Les dije S/.  8.00 soles (8 nuevo soles), ¿qué poco no?  Me preguntaron, si pues acerté es que no hay más trabajo y tengo que reunir dinero para seguir estudiando,  es allí donde me hacen la propuesta. Me preguntan, sobre mi familia, y le he sido sincero les comente que crecía solo y que estudiaba así y aprovecho las vacaciones para trabajar, bien me dijeron eres el joven perfecto que estamos buscando, es un trabajo muy especial pero quiero saber si ¿tienes miedo o no? De eso dependerá mucho el trabajo,  te pagaremos S/.30.00  soles diarios desde el momento que partas con nosotros hasta el final del trabajo y ¿de qué se trata el trabajo? Pregunte, me respondieron se trata de no tener miedo y ser valiente. No estarás solo, nosotros estaremos allí contigo, solo que somos ya casi ancianos y no tenemos las fuerzas como cuando éramos jóvenes. Así que necesitamos de tu ayuda y te pagaremos bien. 
Bien 30 soles me pareció perfecto con eso iba a abastecer un buen gasto de mis estudios. Al parecer mi inocencia e ignorancia me estaba haciendo firmar mi sentencia de muerte.
Me dijeron el sitio es sierra y el trabajo será en la noche, y así fue  me dieron un adelanto de 150 soles era un dineral en ese entonces, por lo que me fui muy animoso, llegamos a un lugar llamado ambo allí dormimos, me hicieron comprar: grasa de carro, ir a pedir de la iglesia agua bendita, cada vez que misionaban, lo hacían en botella, para juntar orines, hoja de coca, cigarros mapachos, uchinas, y aguardiente de caña, chompas dobles, una caña de carrizo, y una bolsa blanca de plástico amarrado en la punta, pala y pico, a los cuales los ancianos habían echado agua bendita, diciendo unos credos que no comprendía.                     
Desde que pedí agua bendita en la iglesia y aún más cuando vi que decían credos a las herramientas empezó mi curiosidad y me preguntaba entre mi ¿Qué tipo de trabajo voy a hacer? Tanta intriga y curiosidad les pregunte: haber señores ¿qué tipo de trabajo voy ha hacer?  Esto de agua bendita y estas oraciones me llenan de curiosidad, no te preocupes joven tu solo seguirás nuestras indicaciones y solo tendrás que cavar.
Al siguiente día, tomamos un carro rumbo a un lugar llamado Maraypata, luego nos dirigimos hacia la falda de un cerro, donde armamos un pequeño campamento y esperamos la noche. En el día me indicaron donde debía de cavar.
Cuando era las 9 de la noche, me dijeron desvístete y échate la grasa de carro por todo tu cuerpo que esto es indispensable, trata de que todo la grasa cubra tu cuerpo, solo los ojos que queden descubiertos, luego me puse las chompas encima de mi cuerpo grasos,  los ancianos se sentaron a unos 15 metros de distancia de donde iba a cavar.  Sacaron sus bolsa de coca, cigarros y aguardiente, empezaron a hacer una serie de  rituales y oraciones que no comprendía me hicieron plantar el carrizo  a medio metro de distancia de donde tendría que cavar con la bolsa blanca arriba, empezaron a encender una lámpara petromax,  y me dijeron: cuando el aire que corre por donde estas, si la bolsa se pone a la derecha tú, tienes que hacerte a la izquierda, si se pone a la derecha tienes que ponerte a la izquierda cada que saques tierra o picada que des tienes que mirar a la bolsa. No importa cuánto te demores y si se detiene la bolsa o el aire no corre, te sales hasta que el aire empiece nuevamente a correr,
Bien con una lámpara petromax da una buena luz, así que se podía ver bien claro las cosas antes de dar una picada, me llamaron los ancianos y me preguntaron cuál es mi nombre. Me dieron de masticar coca que era necesario y aguardiente para que me de fuerzas y valor, me hicieron fumar 3 mapachos ya eran las 11 de la noche y empecé a cavar hacia un frio fuerte, seguí las indicaciones de los dos ancianos, ya cavaba como 1.20   metros   a cada instante me preguntaban si encontraba tierra quemada, pues la verdad si a partir de 1.20 empecé a encontrar tierra quemada, y me dijeron que cabe más despacio con tranquilidad y paciencia, mientras cavaba escuche a los ancianos decir que era un tipo afortunado y valiente, sonreí entre mi hasta que di un pequeño golpe en el suelo que hizo revotar la pala, en ese momento los 2 ancianos me dijeron, sal del hoyo lo más rápido que puedes,
Pues Salí y los dos ancianos trajeron las botellas con orines mientras decían una serie de credos, y rituales hasta ese momento no sabía que era des pues de media hora me dijeron que entrara otra vez a descubrirlo bonito con cuidado. Pues era un tipo de cuero que contenía algo duro y pesado
Luego de haberlo descubierto, algo extraño paso, el aire se hizo más helado, que quería quebrar mis huesos, y no podía salir del hoyo los dos ancianos al momento me echaron agua bendita y el orine podrido en todo el cuerpo y me ayudaron a salir, me dieron de beber aguardiente y me fumaron con cigarro, todo este trabajo duro horas y eran casi las 4 de la mañana cuando me ocurrió eso,  cuando me recupere tuve temor en volver a entrar pues fue una sensación fuera de lo común.
Cuando empezó a rayar el alba mi cuerpo adolescente estaba agotado y así decidí entrar efectivamente era un cuero doble posiblemente de vaca, no era tan pesado podía levantarle, lo saque del hueco y le lleva canto a la quebrada, donde me indicaron que le echara mucha agua, así lo hice por más de dos horas,  pero en ningún momento los ancianos dejaban de rezar credos y padre nuestros, una vez que termine me dijeron que me retirar por que iban a abrir el cuero, ese momento me cancelaron todo mi dinero más mis pasajes de regreso  estadía de hotel y comida encima me dieron una propina.   
Pero grande fue mi curiosidad por querer saber que contenía el cuero, estos dos ancianos se miraron mutuamente y me dijeron, bueno joven te vamos a contar porque eres un tipo muy afortunado y has salido vivo de esto,  te vamos a ser sinceros.
Al sacar los tapados o tesoros escondidos existen muchos riesgos de muerte: el oro y la plata está asociado a dos elementos químicos y materias espirituales que ni siquiera te imaginas,  la grasa de carro que te echaste por todo el cuerpo, te protege del arsénico, que es un gas que te topa la piel y te empieza a matar, el Antimonio es un gas que hueles y te revienta los pulmones, lo otro es que te presente una ilusión de una imagen descomunal que te de un infarto, y lo otro que tu vida lo cambie por el tesoro que acabamos de sacar.
Generalmente, buscamos gente que no tenga familia para estés trabajos, lo traemos desde lejos si tiene suerte viven pero muy pocos lo hacen. Tú eres u ser afortunado. Y por eso te estamos pagando bien mucho más de lo que te habíamos ofrecido ¿contento?.
Queeeeeeeeee????????????????????????????????????????
Como gratitud de tu apoyo y esfuerzo vamos a abrirlo en tu delante, con sumo cuidado procedieron a abrir el misterios  cuero, o que grande sorpresa  monedas de oro, y algunas piedras de oro, puro. Que en ese momento me dijeron para seguir echándole agua y más agua. Después de todo eso los dos ancianos se cortaron el dedo y lo hicieron gotear en el tesoro. Una vez lista las cosas y arreglados los paquetes, toda las cosas dejaron botando incluso hasta sus ropas, en el camino de regreso le iba haciendo una serie de preguntas. 
¿Qué a quien se lo va a ocurrir enterrar monedas de oro en un cuero de vaca bajo un cerro a una distancia enorme y por qué y que monedas tan raras son estos?.
Se llaman ESTERLINAS, y cada moneda pesa entre 8 a 10 gramos de oro puro, también hay de pura Plata, y eso ¿cómo es que se vinieron a dar hasta estos lugares?...
ACÁ EMPIEZA LA HISTORIA REAL...